amlo presidente de mexico confia en biden, llama a esperar, por que invertir en mexico ayudará a estados unidos

El viernes 12 de febrero del 2021 presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró los anteriores comentarios de la viceministra de México, respecto a Joe Biden el Presidente número 26 de Estados Unidos, señalando que confían en su administración y los cambios favorables que traerá para ambas naciones, sin embargo llamó a esperar, ya que apenas ha comenzado su administración.

El mandatario mexicano espera que la relación se concentre en fortalecer el desarrollo económico de la región, una vieja promesa pendiente de Estados Unidos con México en la que aún quedan muchas dudas, como, ¿por qué los mexicanos son ilegales en Estados Unidos? Una serie de razones históricas demuestran la inequidad del tratado en desfavor de México, algo a lo que AMLO espera cambie muy pronto.

Y quién sabe… podría ser… La administración de Joe Biden ya aceptó la tesis mexicana, de que la migración masiva no se frenará con muros, sino con desarrollo. Un paso muy importante y difícil de aceptar tanto para mexicanos como estadounidenses, al tratarse de enviar recursos a Centroamérica para generar empleos allá.

Si los migrantes se van de su país es por una razón… ahora que, si Estados Unidos quiere mantener a muchos migrantes detrás de la raya, sería bueno que la prometida «inversión extranjera» llegara, esa leyenda de la que sexenio tras sexenio forma el hito principal de los discursos políticos y hasta el momento solo ha significado un desplazamiento de los intereses nacionales y un desequilibrio económico sumamente notorio.

Sueldos mediocres para atraer la inversión extranjera

Los sueldos mexicanos se redujeron, «para que la inversión extranjera encontrara atractivo invertir en la República»… y aún manteniendo los sueldos muy bajos, los inversionistas se fueron pero a la República Popular de China, donde invirtieron en enormes fábricas, teniendo a su «socio» justo a un lado. Un desprecio que nos ha costado caro durante décadas, desde entonces México ha descendido poco a poco como potencia mundial mientras el papel del país y la relación de cooperación se concentraba solamente en la guerra contra el narcotráfico.

Esta guerra no solo significó ahuyentar la presunta inversión extranjera prometida, si es que realmente había capital destinado a invertir… también significó el asesinato de ciudadanos mexicanos dentro del territorio y un país presa de las fuerzas de seguridad extranjeras. Pero, ¿el desarrollo en dónde quedó?

La Remesa

Hoy en día, la humillación va más allá, los sueldos no solo son muy bajos respecto a Estados Unidos, sino que para facilitarle más a las empresas estadounidenses competir globalmente: nuestros trabajadores fingen «no existir», se visten de norteamericanos, usan ID norteamericanas, y trabajan en Estados Unidos, pero nadie sabe que realmente son mexicanos. Ése, es el máximo orgullo de México, y con cariño le decimos «la remesa«. Algo sagrado en México, al no existir otra fuente de ingresos tan «accesible», fácil y asequible en nuestro territorio.

Percepción internacional sobre Biden

Pero no crean que somos los únicos a la espera de que Joe Biden llegue para cambiar el mundo, y convertir por fin a Estados Unidos en un pan de Dios, estilo China; contrario a lo que Trump nos mostró. No, también los «enemigos de la Casa Blanca» están esperando que por fin haya congruencia en la presidencia estadounidense, y no sean utilizados como mercenarios ni jueguen al papel de policía del mundo. Algo que en Estados Unidos no se escucha, y cuando se llega escuchar, la respuesta más común es: LOL.

A nivel global, Biden ha despertado la confianza en los «enemigos de Estados Unidos» como Irán, Venezuela, China y Rusia, todos han anunciado que esperan que las relaciones bilaterales mejoren en beneficio del desarrollo y la estabilidad global.

Por ejemplo, el mandatario estadounidense plantea cerrar su prisión de máxima seguridad en Guantánamo, Cuba, polémica y muy simbólica durante décadas, en periodismo y la literatura donde se menciona infinidad de veces. También plantea acciones para poner fin a las guerras de medio oriente. Así como manejar una política pacífica con China.

Inclusive, Xi Jinping dijo a Joe Biden que «la restauración y el crecimiento de los lazos China-Estados Unidos ha sido el acontecimiento más importante de las relaciones internacionales durante el último medio siglo y más», reportó Xinhua el pasado 11 de febrero del 2021, en donde se agregó que su buena relación contribuía a la paz, estabilidad y prosperidad mundial. Al mismo tiempo Pekín blinda de acorazados la zona del mar meriodional en la que Estados Unidos había estado husmeando.

Aunque también ha generado dudas, y muchos funcionarios y críticos de estos países mencionados, han exhortado a Joe Biden a no esperar demasiado, con miedo a que la buena actitud del demócrata se aplace y no rinda frutos. Así, tanto los iraníes como venezolanos señalaron que no esperarán demasiado para mantener los canales abiertos a una negociación.

Irán está dispuesto a cumplir el pacto nuclear del 2015 si Estados Unidos termina con las sanciones que le ha impuesto desde entonces. Aunque el viernes 12 de febrero el canciller iraní exhortó a Biden a dejar los discursos y pasar a la acción para cumplir con el acuerdo nuclear.

El gobierno de Caracas dijo que tendrán una excelente relación con Estados Unidos mientras exista respeto mutuo a la soberanía. Cosa que ha fallado desde hace años.

Argentina por su parte mostró preocupación por el movimiento de un submarino estadounidense invadiendo aguas territoriales en compañía de equipos militares británicos. Se considera que estos vehículos discrecionales pueden además portar armamentos nucleares, estas acciones violan la Zona de Paz y Cooperación en el Atlántico Sur acordada en una asamblea general de las Naciones Unidas.

Percepción de Estados Unidos de México

El caso de México es totalmente distinto, la relación bilateral con Estados Unidos se había vuelto con mayor peso favorable para los países al norte en el aspecto comercial y económico.

Con la pandemia y la adquisición de vacunas, México demostró, casi tratando de ocultarlo, que había comprado vacunas a China y Rusia, sí, los presuntos «enemigos de Estados Unidos». Algo en lo que constantemente nos tratan de prender las alarmas, como si fueran ellos nuestros enemigos, cuando nosotros no tenemos broncas con ninguno de estos países, ¿para qué enredarnos en problemas? En esto AMLO ha insistido en que se respete nuestra soberanía, y en favor adquirió primero la vacuna de Pfizer y la de AstraZeneca.

Tratado de Libre Comercio, ¿realmente beneficia a México?

El tratado comercial firmado en la anterior administración, y reiterado por Andrés Manuel López Obrador, hoy T-MEC que ha venido reiterándose desde su primer concepción en 1990, prometía permitir desarrollar la región, sin embargo con el transcurso de las décadas no queda claro cómo realmente se benefició México.

Aquí muchos expertos, o quienes se hayan beneficiado, tratarán de escupir su café con esto que dije. Pero, a ver:

Aunque desde entonces las empresas extractivistas como mineras canadienses aumentaron en el país, ¿cantidad equivale a calidad? ¿Nos ha ido mejor porque son más? La industria o más bien la cadena productiva no fue fortalecida como se esperaba, o como se había dicho y repetido durante años, salvo en el sector automotriz.

Además, ¿qué se gana con, por ejemplo una mina o una embotelladora de agua, si realmente pertenecen a ciudadanos extranjeros? O una maquiladora estadounidense que se niega a seguir órdenes de la autoridad sanitaria de México, a pesar de que 13 empleadas murieron enfermas de Covid-19, inclusive tras varias protestas el peso de la embajada estadounidense las obligó a regresar al trabajo.

Si lo vemos tácitamente, realmente generan muy pocos empleos, en el caso de las minas de oro y plata pura, son productos que salen del país que deberíamos considerar una riqueza perdida. Y es un ejemplo claro de cómo México y su ciudadano realmente no tiene el permiso o las facilidades de explotar muchos recursos ni por sí mismo ni a través de una empresa nacional, sin poder generar así más oportunidades de empleos. Ah y de exportar. Ah, y de crear derivados del producto, generar una buena plusvalía. «No eso aquí en México no funciona, apenas allá… del otro lado».

Y así se van muchos mexicanos, que finalmente tienen que registrar su patente en colaboración de una empresa extranjera para poder ser aceptados y luego expulsados.

En el peor de los casos, como de las embotelladoras, es un negocio doble o hasta triple para algunos empresarios extranjeros, que extraen (te lo quitan), lo embotellan (lo ponen bonito) y lo venden a revendedores mexicanos (te venden lo que ya tenías). La mayoría de la ganancia queda en manos del extranjero cuya empresa continúa quitando recursos y también dinero. Esto es más comprensible si se observan las empresas en un período de varios años. Además, las empresas deciden si dejan de operar o no.

Situación ilegal de migrantes reta veracidad del T-MEC

En las remesas pasa algo muy similar pero con una humillación humana de la que nadie quiere hablar: la ilegalidad de los migrantes mexicanos. Su situación de esclavitud, en la que borran sus nombres, se vuelven empleados anónimos que trabajan a nombre de otras personas, todo esto reta a la realidad institucional: ¿realmente existe un tratado comercial entre México y Estados Unidos? ¿o es el sacrificio que los mexicanos deben hacer para que la economía del norte se fortalezca mientras el ciudadano mexicano no puede adquirir casa en el extranjero?

Para tener éxito debes salir del país: la leyenda

Sin embargo, muchas cadenas de producción quedaron no solo en el abandono, sino en un aparente bloqueo, como el sector tecnológico y científico, en el que a pesar de que México ha tenido importantes personalidades desde entonces hasta la fecha, no han podido desarrollar emprendimientos o empresas exitosas, sino cuando «viajan a Estados Unidos».

La fuga de cerebros no se detuvo, las empresas nacionales escasas ocasiones pueden ingresar a Estados Unidos y los productos mexicanos suelen tener muchas limitaciones, cumplir con normas que solo exigen a México adquirir más servicios de empresas estadounidenses como Monsanto, o el servicio de limpieza de dólares canadiense.

En suma, podemos decir que México no ha aprovechado todo el potencial que el espíritu del tratado comercial supone, pues aún es necesario viajar a estas otras naciones para «tener éxito». Al menos, así reza la leyenda de numerosos emprendedores año con año.

Por eso es que el Presidente Andrés Manuel López Obrador espera que Joe Biden contribuya al desarrollo económico de México, con mayor inversión extranjera para crear empleos dentro de la República.

La eterna promesa de la inversión extranjera

La promesa de la inversión extranjera como método de desarrollo es un fracaso para el país si lo único que tienes para ofrecer es territorio, bajos salarios y abundantes recursos naturales… porque evidentemente te falta un plan de desarrollo, ¿qué vas hacer con ésos ingresos? ¿Cómo puedo hacer eficiente el recurso nacional y aumentarlo sin depender del costo de extranjeros?

Bajo la leyenda de permitirle a la ‘inversión privada’ seguir imponiendo sus reglas, el país se quedará agachado, sometido y tonto. ¿Cuándo se ve un Estado que se doblega, que se debilita así mismo? ¿No quieren los trabajadores del Estado una nación fuerte y adinerada? ¿No quiere el pueblo que el dinero baste y sobre para invertir en un futuro aún más dichoso del esperado? ¿No deberíamos planear y moldear ese futuro?

La promesa de la inversión extranjera no es suficiente para desarrollar a un país. No somos una persona que espera en su cama a que la inversión toque la puerta y haga de nosotros lo que quiera. Debemos vernos y entender que somos una nación cuyo talento puede ser observable y explotable.

De ahí que surjan los deseos de muchos mexicanos de poder ‘controlar las redes’, lo que realmente quieren es que los medios sociales funcionen a nuestro favor, que nos ayuden, faciliten toda tarea social… y ponerlo en manos extranjeras es un dilema larguísimo del que ya hablaremos otro día.

¿Migrantes o esclavitud voluntaria?

Los migrantes mexicanos, una de las fuerzas laborales más importantes de Estados Unidos, aún no son reconocidos y trabajan en condiciones infrahumanas, subvaloradas, sin derecho a estabilidad ni un hogar. Algunos migrantes fungen como esclavos personales, al laborar con la identidad social de estadounidenses.

Un comentario en «AMLO confía en Biden: Esperan desarrollo económico de México»

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