Mientras el mundo cierra fronteras aéreas con varios países de África ante la expansión de la nueva variante de COVID-19 denominada Ómicron, China mejora exponencialmente sus relaciones con el continente africano.
En la ceremonia de inauguración de la VIII Conferencia Ministerial del Foro de Cooperación China-África (FOCAC, inglés), el presidente de la República Popular, Xi Jinping elogió esta relación señalando que es un ejemplo para la comunidad internacional de una nueva forma de construir política internacional para un «futuro compartido».
Aseguran que el secreto es mantener relaciones de cooperación aún en las adversidades, teniendo como eje una asociación basada en la igualdad, muestra de ello será que el intercambio entre ambas naciones no se verá afectado a pesar del COVID-19.
Comercio entre China y África mejora exponencialmente
Previo al anuncio de la OMS, el comercio de China y África aumentó un 27% en enero-octubre 2021, superando los 209 mil millones de dólares, según una estimación de la Administración General de Aduanas china. Durante este período, la importación de productos africanos hacia China superó el valor de la exportación de productos chinos a territorio africano.
África ha recibido en su mayoría productos de mano de obra intensiva, electrónicos y mecánicos. Estos dos últimos han superado el 45% del valor de las exportaciones chinas.
Más de una década de beneficio mutuo
La FOCAC fue inaugurada en el año 2000, y fue desde el año 2009 que China se convirtió en el primer socio comercial del continente africano. Desde entonces los chinos han colaborado en varios aspectos, incluyendo la seguridad de la región y la paz internacional.
Tan solo en infraestructura las empresas chinas han utilizado diversos fondos para construir y habilitar más de 10 mil kilómetros de ferrocarriles, casi cien mil kilómetros de carreteras, alrededor de mil puentes y 100 puertos, así como 66 mil kilómetros de redes de transmisión y distribución energética.
Por otro lado, China ha impulsado la diversificación económica y la industrialización africana, así mismo ha compartido su trayectoria en el desarrollo agrícola y tecnológico. También ha contribuido a vencer la brecha digital en el continente.
Se ha comentado en la FOCAC que también se impulsará el comercio electrónico y tecnología de última generación (5G), así como la economía verde.
China y África no han cerrado puentes aún en momentos difíciles, al contrario ha contribuido a combatir los brotes de Ébola (2014) y otras enfermedades, incluyendo la epidemia de SARS-COV-2, enviando ayuda humanitaria e insumos médicos.