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Con el apoyo de organizaciones internacionales, la derecha fue capaz de «regresar la Biblia y a Dios al Palacio» en Bolivia, así lo nombraban pero se trata del Golpe de Estado ocurrido a finales del pasado 2019, que más allá de buscar expulsar a Evo Morales tras 14 años en la Presidencia al ser reelecto, trataba de imponer una nueva agenda, católica y clientelar en beneficio de unos cuántos.

Además de promover y legalizar el dióxido de cloro como un remedio para el covid-19, durante el mandato de Jeanine Áñez, se dieron algunos cambios relacionados al litio, permitiendo venderlo en bruto a gran escala y bajo costo. Una pésima decisión que iba en contra de los entrantes proyectos socialistas de desarrollo respecto a la explotación de este recurso considerado el oro blanco.

Los proyectos del MAS permitirían al litio generar valor agregado y crear industrias nacionales del recurso del futuro que hace funcionar a los teléfonos inteligentes y permitirá moverse a los autos eléctricos. Pero la oposición de Evo Morales estaba interesada más bien en regresar la relevancia del ‘libro sagrado’ de los católicos, el objetivo era retornar la Biblia al poder, y fue uno de los primeros suspiros que dio Jeanine Áñez.

«Gracias a Dios, ha permitido que la Biblia vuelva a entrar a Palacio. Qué él (Dios) nos bendiga y nos ilumine» dijo la expresentadora de Televisión, Jeanine Áñez al autoproclamarse presidenta interina de Bolivia. Estos actos llegaron a suponer posible injerencia por parte de Roma o España, al urgir un avance del catolicismo en tierra de la bandera Wiphala desde el 2006.

¿Cómo ocurrió el Golpe de Estado en Bolivia?

Turbas, aparentemente pagadas por la derecha interna, incluyendo la participación y halagos de países extranjeros a las manifestaciones violentas, fueron organizadas por exmilitares, militares y el propio ministro de Seguridad coordinaron protestas violentas a las que luego se sumaría la policía.

Hordas de motociclistas, anarquistas, mercenarios, algunos de ellos incluso pintando esvásticas nazis, por lo que no está por demás recordar que que la empresa ACI Systems, la extractora de litio en Bolivia que sigo trabajando aún después de Evo Morales, es alemana.

La exPresidenta del Senado, Adriana Salvatierra reconoció este documental que «No era un golpe contra Evo Morales, era un golpe contra el proyecto político del cual yo también soy parte» razón por la que renunció, y es que en el propio documental somos testigos de lo que le ocurrió a otros funcionarios públicos que no abandonaron su cargo.

Golpe en Bolivia por Litio: Capitalismo de la Mancomunidad contra socialismo boliviano

Aunque la Embajada de Reino Unido en Bolivia negó en un breve mensaje el 10 de marzo la participación de su país en el Golpe de Estado, esto no fue aceptado por la cancillería boliviana pues la publicación periodística de Declassified UK revelaba información que aún queda en incógnita.

Claro, hoy la embajada da esta versión, sin embargo muchos recuerdan el largo historial de intervenciones de la corona británica en Latinoamérica, además el ingreso de Jeanine Áñez retiraría el contrato de un consorcio chino para otorgarlo a Reino Unido. De hecho, este país había anunciado que dicho recurso sería una prioridad para impulsar el uso de coches eléctricos, por lo que apropiarse lo más posible de este recurso les daría ventaja comercial, más aún con la nueva agenda global que pone énfasis en el cuidado al medio ambiente.

Además, Declassified UK publicó que «en marzo de 2020, cuatro meses después del derrocamiento de Morales, el nuevo régimen estaba organizando una serie de nuevas iniciativas «con el Reino Unido como socio estratégico», señalan los documentos», a esto se le suma que fue la embajada británica la entidad que «proporcionó datos para el informe internacional (de la OEA), ahora desacreditado, que se utilizó para justificar el golpe de 2019», agregó la nota.

Durante la administración de Evo Morales, el desarrollo en las técnicas de extracción y producción de derivados en Bolivia se vio impulsada como nunca antes en el país. La estatal Yacimiento de Litio Bolivianos (YLB) tuvo un desarrollo impulsado por empresas internacionales, sin embargo una vez que les abrieron la puerta, se quedaron para extraer todo el litio posible mientras el caos de las protestas continuaban.

Estos proyectos relacionados al desarrollo de un Estado fuerte y con empresas estatales dedicadas al litio afectaría directamente a empresarios como Elon Musk, magnate que incluso sugirió públicamente en varias ocasiones que el Golpe de Estado estaba bien mientras lo realizaran ellos.

Captura de Twitter en la que Elon Musk habla de forma imperialista respecto a golpe de Estado en Bolivia realizados a través de Estados Unidos «para que obtenga litio». Fuente: Axency.com

Aunado a esto, días antes, en plenas elecciones el pasado 9 de marzo del 2021 ocurrió un ataque cibernético procedente del exterior, un procedimiento que comúnmente proviene de países anglosajones al igual que la mayoría de la participación inflada en redes sociales que apoyan a ciertos empresarios.

Nótese la oposición capitalismo del mancomunado británico representado por la OEA y la derecha boliviana contra socialismo del MAS. Desde esta ideología anglosajona devienen también la mayoría de las críticas en contra de la petrolera estatal mexicana PEMEX, ya que estas naciones promueven una agenda entreguista que deja en pocas manos extranjeras la propiedad de enormes recursos naturales, en vez de que los Gobiernos locales se desarrollen, generando empleos, educación, mejores condiciones de Salud y Bienestar.

Finalmente, el 5 de noviembre del 2020, Edgar Villegas un ingeniero informático polémico por presuntamente haberse refugiado en la embajada británica en Bolivia porque según era perseguido por la Inteligencia del país, habría asegurado que realmente no había una cantidad de error de cómputo suficiente para declararlo un fraude. Sin embargo hizo hincapié que la sospecha de la vocal debía tomarse en cuenta para realizar una auditoría de las elecciones.

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