Expresión usada para etiquetar una situación alarmante por los altos riesgos que puede implicar en la sociedad, pero que puede evitarse adquiriendo, desarrollando y/o realizando acciones preventivas.
Alármese quien pueda también se utiliza en noticias alarmantes que sugieren determinantemente una prohibición de actividades, objetos o hasta personas con la presunta intención de evitar que ocurra cierto riesgo, sin realizar un análisis más amplio.
En ocasiones también expresa que existe una condicionante por parte de los vulnerados o propensos a sufrir mayor daño, que los obliga a adquirir servicios o productos. Por ejemplo, adquirir cubrebocas para evitar infectarse.
La función del verbo poder en tercera persona del presente subjuntivo dentro de esta oración a su vez connota que no existe una capacidad o condición equitativa para el imperativo ‘alármese’. En ese sentido podría entenderse también como «solo quien pueda alarmarse lo hará». Dándole un sentido sarcástico al uso de esta expresión.